Una de las opciones que ofrece éste viaje mundialista a
Brasil es la Ruta de la uva y del vino.
Contra la superstición de que en Brasil solo se suda
cerveza, ofrece calidad
y variedad de vinos elaborados en bodegas generalmente artesanales.
Hay
itinerarios por bodegas que reproducen el tránsito del vino de su etapa primitiva
a la moderna, con degustación incluida. Detrás de la barrica, el paisaje se
viste de sierra, con sus colinas y valles que reivindican el turismo rural
La ciudad de Bento Gonçalves, a poco más de una hora
de Porto Alegre, posee grandes viñedos que fueron plantados por inmigrantes
italianos que se especializaron en la producción de vinos finos. De hecho,
éstos son los únicos viñedos brasileños con un sello de origen.
En la misma localidad se encuentra la bodega ganadora como
proveedora del vino con derechos exclusivos en todos los eventos oficiales de
la FIFA durante la competencia deportiva.
Es una viña manejada por la 5ta generación de brasileros
en la Serra Gaucha, al sur de Brasil.
La viña establecida en 1998 cuenta con plantaciones de
las uvas Merlot, Cabernet, Tannat, Teroldego, Tempranillo, Nebbiolo, Touriga
Nacional, Malbec, Pinot Noir, Chardonnay y Moscatel.
Garibaldi en
la capital de los espumantes, una de las
poblaciones más visitadas de la Ruta de los Vinos de Río Grande del Sur, en el
sur de Brasil. Una ciudad serrana que se asienta en una zona de paisajes lindos
de Mata Atlántica y Araucarias. La curiosidad radica en el tipo de espumante
que está creado a base de moscatel, con un sabor bastante más dulce de gran
aceptación en el mercado brasileño, sobre todo en época de navidad.
Datos y Contactos
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