“El horror fue planificado desde el Estado. Nadie puede
negar la dimensión de esos crímenes”, dijeron los organismos de derechos
humanos en el documento. Hubo fuertes críticas a los intentos de relativizar el
terrorismo de Estado y a las políticas económicas del Gobierno.
“Una canción fue cantada en la marcha por el día de la
Memoria y reproducida en las redes sociales.
"Mauricio Macri, no seas gil, los desaparecidos siguen
siendo 30 mil", cantaron en la movilización a Plaza de Mayo.
El mensaje del canto repudia los dichos de Mauricio Macri y
sus funcionarios del Gabinete de Mauricio Macri, como el secretario de Derechos
Humanos, Claudio Avruj, quien dijo que los desaparecidos son 8500.
El negacionismo es una corriente de pensamiento que tiene la
finalidad de reinterpretar los hechos acaecidos en el genocidio del pueblo judío
y armenio afirmando que los mismos no existieron, sino que es producto del mito,
de la fabulación, del fraude con un fin político. En general, las tesis de
estas reinterpretaciones cuestionan o niegan el asesinato en masa del cual
fueron objeto el pueblo judío y otras minorías bajo el Tercer Reich y países como
armenia que sufrieron por parte de los turcos un brutal genocidio.
Las declaraciones del presidente Macri, en las que dijo
ignorar el número de desaparecidos víctimas del terrorismo de Estado, dan legitimidad
desde lo más alto de la institucionalidad la corriente del negacionismo
histórico. Macri no sabe cuántos son, “si son los que están anotados en un muro
o si son mucho más. Es una discusión que no tiene sentido”. A su vez, utilizó
el término “guerra sucia” para referirse a la última dictadura.
Vale decir que Mauricio Macri se ha puesto al frente de los militares genocidas en clara
defensa de ellos, el que piensa lo contrario participa con el de su intención
política que es minimizar el hecho histórico para que no existan juicios a los
represores torturadores de personas que desaparecieron a 30.000 personas.
Es lamentable haber escuchado toda la semana previa al 24 de
marzo de parte de medios televisivos y gráficos que las diferentes marchas tenían
un alto grado político que le quitaba credibilidad. Quiero recordarles a todas
estas personas que Mauricio Macri y sus funcionarios han hecho políticas todas
las marchas de este mes de marzo, la de los maestro por que son ellos los que
digitan la política educativa a seguir,
siendo su responsable máximo Mauricio Macri y la de Memoria Verdad y Justicia
porque el mismo Macri subestimo la cifra de desaparecidos mostrando su lealtad
y reivindicación de las fuerzas armadas argentinas así que a todos aquellos que
no quieren cantar “Macri Basura, sos la dictadura” les asiste la responsabilidad
dado que Macri con su negacionismo va en defensa de los que torturaron
picanearon y mataron a personas, secuestraron a bebés indefensos, usurparon
propiedades ilegítimamente.
Quien escribe esta nota agradece a Dios haber participado y
cantando con 500.000 personas presentes “Macri Basura, sos la dictadura”,
porque el negacionismo es una corriente de pensamiento nefasta y quien no
reconozca esto aunque sea compañera o compañero
de ruta participa del tirano.
Como colofón se publica la carta del ex secretario de
Derechos Humanos Eduardo Luis Duhalde a Graciela Fernández Meijide, donde repasa
los motivos por los que la cifra de 30 mil no resultaba en absoluto arbitraria.
Sus argumentos fueron:
a) “La cantidad de sitios clandestinos de detención y
exterminio, en todo el país, que superan el número de 500”.
b) “Las estimaciones sobre el número de prisioneros que hubo
en los grandes centros de detención y exterminio como la ESMA, Campo de Mayo,
La Perla, el Batallón de Tucumán, el Circuito Camps, El Olimpo, El Atlético,
etc., ya que ellos solos superan con creces el número actual registrado en la
Conadep y la Secretaría de Derechos Humanos”.
c) “La estimación en torno al número proporcional de Habeas
Corpus presentados en el país”.
d) “El número de integrantes de las estructuras militares
afectadas a la represión ilegal durante todo el periodo dictatorial que superan
los 150 mil hombres, activos a la caza de sus víctimas”.
e) “Los propios dichos de los militares previo al golpe de
Estado, de que sus relevamientos efectuados con anterioridad, desde las
escuelas hasta las fábricas, que indicaban en más de 30 mil las personas a
eliminar (ver por, ejemplo, los dichos de un militar en la carta del escritor
Haroldo Conti desaparecido el 5 de mayo de 1976, escrita previa al golpe y
dirigida a Roberto Fernández Retamar de fecha 2 de enero de 1976)”.
f) “Los informes de la embajada norteamericana al
Departamento de Estado, haciendo constar que en el año 1978 los jefes de la
dictadura argentina informaron a la DINA chilena que las víctimas alcanzaban ya
el número de 22 mil. Debe recordarse que la dictadura continuó en su labor
represiva ilegal de secuestros y asesinatos por cinco años más con
posterioridad a ese informe y que aquella cifra de 22 mil correspondía a solo
los dos primeros años de la dictadura”.
Es necesario crear herramientas jurídicas que pongan en
blanco sobre negro la dimensión de la tragedia sufrida por nuestro país entre
1976 y 1983. La propia Corte Suprema ha declarado que los crímenes cometidos en
dicho período se enmarcan en el concepto de genocidio. Dotar a la Justicia de
un recurso para que comparezcan y sean juzgados sus apologistas no sería otra
cosa que la extensión de figuras ya existentes en nuestro Código Penal.
Asimismo sería un gran avance incluir un agravante cuando estas frases sean
pronunciadas por funcionarios públicos, convirtiendo el negacionismo en causal
de juicio político. Es una de las pocas armas con que podremos enfrentar lo que
a esta altura parece un negacionismo de Estado.
por leoveoytecuento
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