FESTIVALITO, en el Lawn Tennis

Los senderos de los bosques de Palermo a la altura de la estación Lisandro de la Torre se colmaron de niños caminando con sus familias, el cielo amenazador con sus nubes negras no pudo con la alegría de los chicos, que al arribar al Lawn Tennis por la Av. De los Ombúes tuvieron la grata recepción de los organizadores que inmediatamente los llenaron de regalos, lonitas, revistas, pulseritas.


Unos pasos más adelantes de la entrada se encontraba la carpa principal, con todo lo necesario para que los chicos se diviertan, Imaginarium dispuso un patio de juegos para pequeños lleno de colores, juegos novedosos, carpas de indios y casitas–peloteros, que hacían las delicias de los chicos y también de los grandes que los acompañaban.



Grisino, pasillo de por medio, invitaba a los chicos a dibujar en unas mesitas con miles de lápices, fibras y crayones, luego recibian un regalito por el dibujito pintado; Fundación Leer ofreció su espacio para que se contaran cuentos; también hubo lugar para la ciencia, la investigación y el yoga.

Sorpresivo y casi escondido se encontraba el Espacio de Cine con un continuado de cortometrajes para el deleite de los chicos y organizado por la Asociación Nueva Mirada, que entre las obras ofreció "UN PINGÜINO DESORIENTADO – LOST AN FOUND, DE OLIVER JEFFERS" (ver comentario en: http://leoveoytecuento.blogspot.com/2011/10/un-pinguino-desorientado-lost-found-de.html). En el Espacio al Aire Libre se encontraba en primer lugar el arte ecocolectivo, con juguetes y muñecos artísticos hechos con botellas papelitos de golosinas recicladas.

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La música de un rincón sonaba fuerte con los Bigolates de Chocote con su cajones de percusión , la guitarra y tres ocurrentes cantantes proponían canciones y bailes a la pequeña audiencia acomodados en sus lonas.
Para los que querían meditar y/o aprender a jugar estaba dispuesto el taller de
Pre-ajedrez y ajedrez gigante organizado por El Caballito de Palermo con muchos juegos de ingenio, tableros para chicos de hasta 12 años.


La expresión artística estaba en manos de Jardín Rodante La Huella que invitaba a los chicos a participar de un mural gigante con colores alegres todos querían dejar parafraseando su huellita, una flor, una mariposa, un sol y su nombre impresos.
Los platos fuertes de la jornada fueron la encantadora y siempre dispuesta Mariana Cincunegui que en una hora aproximadamente canto un amplio repertorio de sus canciones en la que no falto la clásica “¿Qué tiene la sopa del bebe?”. Y a las 18 horas, antes de la lluvia la banda de rock favorita de los chicos "Papando Moscas" con su hit Cabeza de Chorlito.
La propuesta fue más que fascinante en la jornada del 19 y 20 de Noviembre, esperamos se repita el año que viene, sus pequeños y adorables admiradores ya preguntan “¿Cuándo volvemos de nuevo?”